La gente del futuro –
Editorial del 1 de julio de 2016
Pedro y
Pablo es (fue) un dúo de folk rock y canción de protesta argentino, integrado
por Miguel Cantilo y Jorge Durietz, creado en 1968 y considerado como uno de
los pioneros del rock argentino. Ellos hicieron un tema del cual tomé el título
para el editorial de hoy, y también uno de sus versos, harto elocuente y que
parece escrito en estos días.
“Y dónde
estás tú, famoso gurú
Ahora que se
fueron y apagaron la luz
Esta es la
gente del futuro, y este presente, tan, tan duro
Es el
material con que edificaremos un mañana total
No sirve de
nada clavarse el puñal
Llorando la
carta del tango fatal
Tenemos que
hacernos, un mundo mejor
Porque este
está enfermo y nosotros no”.
Yo sigo
empeñado en basar mis escritos, de un tiempo a esta parte, en las
contradicciones que, si bien desde Crónica, como ya dije, habíamos resaltado
sin temores y, debo reconocerlo, sin ningún tipo de censura, nunca me imaginé
que iban a llegar a tal extremo, después de doce años de un espejismo basado en
mentiras como método de discurso y en demagogia como sistema de gobierno.
Comencé a
escribir un poco antes de la hora normal de inspiración, teniendo en cuenta que
el día de cierre de la edición es el jueves, pero esta vez es feriado por ser
el aniversario de nuestra ciudad, de manera que me propuse tomar algunas
temáticas de última hora como para seguir demostrando que la supuesta “década
ganada” en realidad lo fue, pero para muy pocos, casi se podría decir, “para
los íntimos”.
Pese a las
iniciales negativas, e incluso a la expresión tan poco feliz de una descolocada
Hebe de Bonafini, que trató a José López de “infiltrado”, e incluso a los
intentos del Frente para la Victoria de “sacárselo de encima” del Parlasur, aun
sin cumplir con los requisitos formales que hasta los mismos opositores
exigieron, hace un rato nomás el diario La Nación publicó una serie de imágenes
que muestran a la ex ministra de Desarrollo Social, Alicia Kirchner, junto al
ex secretario de Obras Públicas, José López, la hermana Alba y el obispo Rubén
Di Monte, religiosos del convento de General Rodríguez donde López fue detenido
tras arrojar bolsos con millones de dólares. Bueno. Por lo menos eso de
“arrojar bolsos” es lo que se podría denominar la “historia oficial”, ya que en
un terreno tan abierto a las suspicacias, y teniendo en cuenta el peso de los
bolsos con plata y la contextura y aptitud física de López, no es de descartar
la idea de que lo que el tal vecino Jesús vio fue cuando se tiraban los bolsos
vacíos para el otro lado y las "monjitas" y López, después, en la
cocina, sacaban la plata de la cripta
(recordar que los perros olieron papel moneda) y los llenaban. Y que lo
que en verdad pasó es que cuando llega la policía aún no habían terminado de
llenarlos, y el tiempo que tardaron en abrir a las fuerzas del orden fue el
necesario para cerrar la cripta, y ordenar un poco el lío. O sea, que no iba a
dejar sino que estaba sacando lo que ya había guardado. De esa manera hasta se
puede fundamentar la hipótesis de que el tiempo dando vueltas de López era para
esperar a que las "monjitas" terminaran de sacar la plata de las bóvedas.
Y como suele
haber gente que es susceptible a tratamientos apresurados de ciertos temas (yo
mismo los soy, si no están bien fundamentados), quiero decir, a propósito del
uso del término “monjitas”, que por algo salió presurosamente el Obispo de
Mercedes a decir que el Convento era una entidad "civil" de fieles
que nada tenía que ver con la Iglesia y encomilla la denominación de monjas
como si éstas fueran "disfrazadas" y usurpadoras de la condición de
tales. Lo que le faltó explicar es por qué el anterior Obispo, claramente
alineado con los Kirchner, vivía entonces en ese lugar, de hecho privado, y por
qué el Vaticano lo autorizó a ser enterrado en una bóveda debajo del altar,
siendo que se trataba de su propio domicilio y no un recinto eclesiástico
oficial.
En realidad
yo necesito ya muy poco para convencerme de que ese lugar fue tomado por la
banda (asociación ilícita que ya tiene a varios miembros encarcelados y a otros
por) como centro de depósito temporario de "recaudación" de los dineros
mal habidos y que las bóvedas estaban destinadas a ese fin. Allí concurrían
entre otros los personajes que detentaban poder de recaudación ilícita como el
propio gobernador de la provincia, Daniel Scioli, además de Moreno, López,
Echegaray y otros funcionarios como así también el exministro De Vido, hombre
más que destacado del riñón presidencial. Los billetes venían de otros recintos
“húmedos", ¿casualidad o causalidad?, los perros detectaron la existencia
de depósitos anteriores de dólares ¿si allí los hubo, donde están ahora, como
dice la canción del título? Lo que estuvo allí no fue sacado para evitar su
aparición, porque de lo contrario no hubiera ido López a guardar los que se
encontraron. Esa es una indiscutible señal de que todavía se consideraba seguro
el lugar. Las reformas edilicias y la implantación de sistemas de seguridad y
control a distancia en forma remota por Internet no tienen correspondencia con
las actividades de clausura que se difunden.
La verdadera
historia, que no es la que escriben los que ganan, nos va a demostrar que así
como no supieron ser inteligentes para llevar el país adelante, en una época de
impresionante bonanza, tampoco fueron inteligentes a la hora de robar y qué
hacer con el "físico". Para todos estos “tirifilos”, el mundo
comenzaba y terminaba en Santa Cruz, lo que implicaba un desconocimiento absoluto
de las finanzas en el mundo. Y así comenzaron a juntarla en la azucarera,
después en cajas más grandes, luego se compraron la caja fuerte (a la que se
abrazaba con pasión Néstor), después, como no les alcanzó, pasaron a los
bolsos, para ir escondiendo en otros agujeros, y quién sabe con qué nos vamos a
encontrar todavía. Todo lo que tienen a su nombre y de testaferros es robado.
El día que tengamos justicia de verdad, miles de millones deberán regresar a
las arcas del Estado y del pueblo, esos miles de millones que están repartidos
por cualquier lado y cualquier país, pero se pueden encontrar si se quieren
encontrar. La solución, claro está, no es ir con una excavadora haciendo pozos,
como ya lo dije en un editorial cuando se descubrió lo de Báez.
Mientras
tanto (estoy buscando la noticia
contrastante), la imagen del chico mbyá descalzo portando la bandera argentina en
el acto del 20 de Junio, conmueve en las redes sociales. Es alumno de la
Escuela 948, ubicada dentro del Parque Provincial del Valle del arroyo Cuña
Pirú, en la comunidad de Ñamandu. Casi todos los estudiantes que asisten a esa
Escuela, en Misiones, van descalzos. Sus padres no tienen dinero para
comprarles zapatos, viven en viviendas sin electricidad ni agua potable y comer
todos los días es una esperanza que se difumina si no van al colegio, donde por
medio de donaciones la maestra les provee alimento a los alumnos, ya que el
establecimiento no cuenta con un comedor, a pesar de que los chicos asisten a
jornada completa, desde las 8 hasta las 16 horas.
Y ahí
encontré la noticia que estaba buscando en mi archivo. Durante la visita de
Cristina Kirchner a Nueva York, en septiembre de 2011, un diario de Murdoch
publicó que ella había gastado U$S 110 mil en calzado de Loboutin (una de las
firmas más famosas, y cuya lista de “fanáticas” es larga e incluye a Paris Hilton,
Jennifer López, Kate Moss, Charlize Theron, Courtney Love, Anne Hattaway, Heidi
Klum, Madonna y Christina Aguilera). Si hubiera comprado los más caros, decía
la nota (la tengo guardada), serían 46 pares nuevos.
Menos mal
que, para mi consuelo, ayer, 28 de junio, al cumplirse 50 años del golpe que
derrocó al presidente Illia, con la complicidad de muchos que después lo
negaron, pude leer esta frase:
“Illia fue
un paradigma de honestidad y republicanismo. Don Arturo fue derrocado, entre
otras cosas, porque derogó los contratos petroleros -que restableció Onganía-,
por la ley de medicamentos que agredía a las corporaciones multinacionales -y
que derogó Onganía-, por la ley del salario mínimo, vital y móvil -que derogó
Onganía-, porque terminó con la proscripción del peronismo; por la inversión en
Ciencia y Tecnología, que afectaba a intereses multinacionales- que también
interrumpió Onganía- y por oponerse a la invasión de los Estados Unidos a la
República Dominicana, entre otras cuestiones". Y por eso murió pobre y,
seguramente, con un solo par de zapatos.
Dr. Mario Ignacio Arcusin, para Semanario Crónica de Basavilbaso