jueves, 16 de enero de 2014

Estamos del tomate

Estamos del tomate – Editorial de 17 de enero de 2014 Continuamos hoy con la temática de la pasada semana, en la misma línea de la “victoria pírrica”, y aún a riesgo de no ser originales, ya que la mayoría de aquellos que no son chupamedios, está tratando por estos días este tema, más o menos de la forma en que lo estamos haciendo nosotros. El fin de semana pasada encontramos en varios medios nacionales lo que, si no fuera casi imposible de creer, parecía una copia de nuestro “Ganó Pirro”. Eso ya nos ha pasado, e incluso alguna vez escribimos una carta a La Nación haciendo notar esa “coincidencia”, teniendo en cuenta de que nuestros editoriales se publican también en un blog, con lo cual se podría tener acceso fácil. En esa oportunidad hasta el título era el mismo. Esto pondrá felices a aquellos amigos demasiado condescendientes con nosotros, que nos sugieren que esta página debería ser publicada en otros medios de más alcance provincial y nacional. Pero está bien, nosotros vivimos acá dónde nacimos, o, como dice Julio Federik en su genial descripción de Entre Ríos, “porque este es mi lugar y aquí me quedo, otro será mejor, pero este es mío”. Terminada esta introducción, debemos decir que el título tiene que ver, obviamente, con la soberana estupidez de la que fuimos testigos los argentinos por estos días, cuando el Jefe de Gabinete de la Nación, que fue elegido para gobernar el Chaco, pero que pidió licencia en ese cargo para el cual la gente había confiado en él, y aceptó este nuevo, en el que debe ganar “buena plata” y, además, supuestamente lo pone (o lo ponía) en la carrera presidencial de 2015, haya dedicado una conferencia de prensa por cadena nacional para hablar del precio de uno de los ingredientes de la famosa y argentina ensalada mixta. Lo único que falta es que en las próximas semanas nos ilustre acerca de la lechuga y de la cebolla, como para completar el plato y justificar el nivel de sus ingresos. Esa, señores, es la verdad de la milanesa. Con ensalada, por supuesto. Ayn Rand, exiliada rusa en los Estados Unidos, filósofa y escritora, refiriéndose al régimen de Stalin, en particular, y a la Unión Soviética, en general, escribió en 1950 el texto que sigue. Pero, mal que nos pese, la semejanza con nuestra situación actual es más que evidente. "Cuando advierta que para producir necesite obtener autorización de quienes no producen nada; cuando compruebe que el dinero fluye hacia quienes no trafican bienes, sino favores; cuando perciba que muchos se hacen ricos por el soborno y por influencias más que por el trabajo, y que las leyes no lo protegen contra ellos sino, por el contrario, son ellos los que están protegidos contra usted; cuando repare en que la corrupción es recompensada y la honradez se convierte en un autosacrificio, entonces podrá afirmar sin temor a equivocarse que su sociedad está condenada." Cuando un país sufre disturbios, saqueos, cortes de electricidad y una inflación galopante, lo normal es que las personas libres busquen que sus líderes restauren la calma y el orden. Pero, sin embargo en plena crisis energética y de reclamos salariales que derivaron en saqueos y en por lo menos 14 muertos, la presidenta ha cultivado un perfil bajo. Tal vez sea porque en diciembre un grupo de periodistas de investigación del diario La Nación publicó una serie de artículos que decía que tanto Cristina como su marido, quien falleció en 2010, se enriquecieron con un programa de obras públicas en su provincia natal de Santa Cruz. ¡Y pensar que por mucho menos que eso Fernando de la Rúa tuvo que huir precipitadamente (Gracias Les Luthiers) en helicóptero y es vilipendiado hasta el día de hoy. ¡Ni su partido lo defendió, por lo menos orgánicamente, ya que estamos! Parece que sus dirigentes no leyeron el testamento de Alem. ¡Por Dios! Volviendo a las acusaciones hacia el matrimonio presidencial, los reporteros señalaron que un testaferro de los Kirchner asumió el control de un puñado de empresas constructoras de Santa Cruz y, posteriormente, consiguió una serie de contratos de obras públicas a precios inflados, agregando que el mismo contratista le dio a los Kirchner sobornos importantes al lavar dinero a través de hoteles en Santa Cruz que pertenecían a la Primera Pareja. La presidenta niega todas estas acusaciones y dice que “¡provienen de los fascistas!”. Para colmo, después de diez años de gobiernos kirchneristas, el Poder Ejecutivo ahora controla la mayor parte del Poder Judicial. Es improbable que los llamados para una mayor transparencia lleguen muy lejos. Por otra parte, una espiral inflacionaria que agota la paciencia y una población que se siente tan impotente como la de la Argentina actual en algún momento se hará escuchar. Como prueba de esa desconexión con la realidad que evidencia el gobierno, y que nosotros acá ya hace un tiempo comparamos con la parábola de “El Rey desnudo”, un cuento de hadas danés escrito por Hans Christian Andersen y publicado en 1837. La historia es una fábula o apólogo con un mensaje de advertencia: “No tiene por qué ser verdad lo que todo el mundo piensa que es verdad”, o, también, “No hay preguntas estúpidas”. Esa desconexión evidente con la realidad, que de todas maneras ni les interesa, hizo que en medio de la crisis el Gobierno decidiera invertir casi cuatro millones de pesos en un sistema de emergencia que proporciona energía de manera ininterrumpida. Son baterías de gran magnitud para garantizar que la Casa Rosada no sufra las consecuencias de un corte del suministro eléctrico. Fueron tres contrataciones destinadas a comprar el equipo, instalarlo y adecuar el subsuelo del edificio para su colocación. Los llamados a licitación se publicaron en el Boletín Oficial en la última semana de diciembre, en medio de los múltiples cortes de luz que padecían los vecinos de Buenos Aires. El 16 de diciembre pasado, la sede gubernamental se había quedado sin servicio durante ¡diez minutos! El secretario General de la Presidencia, Oscar Parrilli, acusó al diario La Nación de "mentir" e incurrir en "una falta grave a la ética" por publicar la noticia primero en su edición digital y luego en la impresa, lo que hizo que el citado medio aclarara que la fuente de la información publicada eran los pliegos de la licitación publicados en el Boletín Oficial el 28 de noviembre último y subidos más tarde a la Web de la Presidencia. Allí se hace referencia a tres licitaciones por casi cuatro millones de pesos para equipar a la Casa Rosada de un sistema capaz de dejarla a salvo de los numerosos cortes de energía que afectaron a la ciudad y al área metropolitana. En dos de esas licitaciones el Gobierno fija una base de 3.877.167,43 pesos. La tercera licitación, que hace referencia a tableros eléctricos, no especifica ningún monto. El Gobierno solicitó un "montaje electromecánico de un sistema de energía ininterrumpida UPS 2X300 KVA" en la licitación 40/2013, con un presupuesto de $3,6 millones. "Pone en marcha un sistema de emergencia que mantiene el fluido eléctrico y evita que haya corte alguno, por más mínimo que sea el tiempo que demore en activarse el grupo electrógeno", explicó un experto. "Es un equipamiento de gran magnitud", coincidieron los especialistas. "Se trata de un sistema de baterías que se utilizan en las actividades en donde es imprescindible la energía constante, como un quirófano o una torre de control de un aeropuerto", dijo otro técnico. "Por la potencia y las características, aparenta ser una instalación de gran magnitud, de las más importantes del mercado", observó, en base a los pliegos de la contratación. "No existe fabricante de este tipo de equipos en el país, seguramente será importado", arriesgó. Muchos vecinos de Buenos Aires, en cambio, permanecieron varios días sin suministro, y el problema aún no está completamente solucionado en distintas zonas de la Capital. Por eso, Sr. Parrili, en cuanto a la ética, es bueno ponerla como tema de debate en un país estragado por la corrupción. Pero no debe limitarse a la actuación del sector privado, sino al modo en que se utilizan los recursos del Estado; al modo en que los funcionarios rinden cuentas de sus gastos y de sus ingresos; a la forma en que se contratan obras y servicios públicos; a la disposición gubernamental para responder la requisitoria de la prensa. Porque no solo de tomate vive el hombre. Dr. Mario Ignacio Arcusin, para Semanario Crónica de Basavilbaso

1 comentario:

  1. sr. mario es como todo, escribir estupideces, hace lectores estúpidos, hablar es gratis y decir boludeces tambien, como tu bien dices, ocupate del pago chico de tu baso. solo de tu vaso no te el la imaginacion para ser de la política un análisis, dado que no entendes el significado de política,que es el ocuparse de la cosa publica.(y todo es publico) por algo el pueblo los voto, 1) no se de que trabajas, pero debes saber que uno ingresa como empleado en una empresa y luego puede ser gerente, porque no ser jefe de Gabinete, y llorar por el corrupto de de la Rua. es ser ignorante, es no pensar que pelotudes, haber votado a ese idiota. a de la inflacion queres hablar, es simple este pueblo que vos defendes esta llenos de sipayos, personas que venden su alma por un dolar. un dolar, un papel de los americanos hijos de puta que no quieren que nosotros los pueblos de 3 mundo porque ahi es donde vos vivís, y queres codiate con las grandes metropolis, Londres, tokio, Madrid, Moscu, déjate de joder. seguí en tu pueblucho dividido por una vía. y deja de leer la nacion.

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